Helado de cerezas confitadas

     ¡Y seguimos con los helados! ¡Le estoy dando una caña a la heladera que está que echa humo! Es lo que más me apetece cocinar con estas temperaturas, así que seguro que caerán más recetas de helados durante este mes.
     Hay quien piensa que hacer helado es algo trabajoso por los tiempos de espera que requiere. Yo caí en la trampa de pensarlo también pero con la heladera en realidad lo único que tenemos es esperar a que se congele el vaso y nada más.
     Para esta ocasión me he decantado por un helado de fruta, en concreto, de cerezas. Tenía muchas ganas de probar con este sabor y resultado ha sido muy bueno. Os dejo la receta:

500 gr. de cerezas sin hueso
500 ml. de nata para montar
150 gr. de azúcar
Una cucharada sopera de azúcar invertido
1 vaso de agua.

    En primer lugar, deshuesaremos las cerezas. En la receta del gazpacho ya os conté el truquillo de hacerlo con un cartucho plástico transparente de los bolis Bic. Les quitamos la mina de tinta y el tapón del final, lo lavamos y secamos bien, y listo. Presionamos con el cartucho plástico del boli por uno de los lados de la cerezas y veréis como sale hueso fácilmente.
     Cuando hayamos deshuesado nuestras cerezas comprobaremos que tenemos los 500 gr. que necesitamos.
     El siguiente paso es hacer una especie de confitura con las cerezas, haciendo una especie de mermelada. En una cacerola pondremos las cerezas, el vaso de agua y los 150 gr. de azúcar. Lo pondremos a fuego medio y dejaremos que suelten su jugo y se confiten con el azúcar durante una media hora. Mientras tanto es aconsejable remover de vez en cuando.
     Pasado ese tiempo notaremos que el jugo que han ido soltando las cerezas se ha hecho más denso y lo retiraremos del fuego y lo dejaremos enfriar.
     Una vez frío lo trituraremos y parasaremos por un "pasapuré" para que nos quede un resultado lo más fino posible.
     Por otro lado montaremos la nata. Ya sabeis las precauciones que hay que seguir en este tiempo para montar la nata: que la nata esté muy fría y  es aconsejable que el recipiente donde vayamos a montarla esté refrigerado previamente.
     Añadiremos el azúcar invertido a las cerezas, lo mezclaremos y después añadiremos la nata montada. La iremos incorporando poco a poco y con movimientos envolventes. Cuando la hayamos incorporado totalmente, taparemos el recipiente y lo meteremos en la nevera durante mínimo 4 horas.

    Pasado ese tiempo, montaremos la heladera y la pondremos en funcionamiento. A través del orificio de la tapa iremos vertiendo la crema para el helado. Dejaremos que la heladera haga su trabajo durante 40 minutos y después la apagaremos y vertiremos el contenido en un recipiente apto para congelar. Lo llevaremos al congelador por un par de horas más.
¡¡ Y listo!!