Pan kinder y vinagreta de queso

    Como ya sabeis es día 20 y toca Desafío... y no un desafío cualquiera... se trata del Desafío especial del verano para el que hemos contado con unas desafiadoras VIPS cuyas tartas del desafío anterior fueron las más votadas. Ellas son: Carmela, Pilar, Leticia, Nieves y Romina. Y como premio ¿qué mejor honor que ser desafiadoras?
     En esta ocasión, el desafío no es una única receta para todas. Hay cinco recetas, cada una propuesta por una desafiadora y se nos han asignado mediante un sistema de números.
     Mi desafiadora ha resultado ser Leticia que nos ha propuesto preparar Pan Kínder. Muchos de vosotros os habréis quedado tras leerlo como yo... ¿Pero que es esto?¿Y porqué se llama kínder? ¿es que se parece a uno de esos huevos de chocolate con sorpresa dentro? Pues sí...algo de eso tiene. Se trata de un pan sin miga, de corteza crujiente dentro del cual pondremos una ensalada, la que más nos guste.

     ¿No me digáis que no es una idea original para una de esas cenitas que se suelen organizar en verano? A mí me ha conquistado.
     Además que es fácil, rico, y que os aseguro os saldrá a la primera si seguís la receta al pie de la letra. La receta en la que me he basado es la de Webos fritos.

     Leticia además nos pidió preparar una vinagreta con los ingredientes que más nos gustaran. Yo me he decicido por una de queso, me encanta poner queso en las ensaladas y esta vez en lugar de ponerlo en taquitos se lo he añadido a la vinagreta.

     Espero que os guste.

Para el pan:

- 250 gr. de harina de fuerza
- 20 gr. de levadura fresca
- 10 gr. de sal
- 100 ml. de agua tibia
- 30 ml. de aceite de oliva virgen extra

Para la ensalada:

- 200 gr. de pechuga de pollo a la plancha
- 100 gr. de lechuga
- 2 tomates de pera
- 6 espárragos blancos
- aceite de oliva suave
- vinagre
- sal

Para la vinagreta de queso:

- 100 ml. de aceite de oliva suave
- 25 ml. de vinagre
- 4 cucharadas soperas de queso de untar
- sal

     En primer lugar desmigaremos la levadura en un vaso de agua tibia y removeremos hasta su disolución.
     Pondremos la harina en una superficie lisa y limpia y le añadiremos el agua donde hemos disuelto previamente la levadura. Los mezclamos bien con las manos durante 5 minutos.
     Añadiremos la sal y seguiremos mezclando unos minutos más.
     Por último añadiremos el aceite de oliva y mezclaremos  durante 10 minutos hasta conseguir una masa compacta que no se nos pegue en las manos ni en la superficie de amasado.
     Formaremos una bola y la cubriremos con un paño limpio y la dejaremos que repose durante una hora aproximadamente.

     Pasado el tiempo de reposo, veremos que la bola de masa ha aumentado su volumen.
    Pondremos a precalentar el horno a 220ºC y después bajaremos la temperatura a 180º C cuando vayamos a poner el pan dentro.
    Mientras tanto enharinaremos la superficie donde vayamos a estirar la masa y con la ayuda de un rodillo la dejaremos muy finita.

    Para dar forma de bola necesitaremos papel vegetal del que usamos para hornear.   
    Dependiendo del volumen que queramos dar a nuestro pan necesitaremos más papel o menos. La cuestión es arrugar una lámina de papel vegetal formando una bola con él (o dos bolas en caso de que queráis que el pan quede más voluminoso) y cubrir el papel con la masa, poniendo especial cuidado en meter hacia abajo los bordes de masa y si fuera necesario pincelarlos con un poquito de agua para que se cierre bien.
     A mí se me ocurrió poner de base un plato y sobre éste poner el papel vegetal. Queda muy bien porque parece que toma más cuerpo en la parte de la base, pero después es complicado sacarlo. Así es que no lo recomiendo porque no merece la pena pasar un mal rato.

     Por último lo espolvoreé por encima con un poquito de harina de maíz y al horno.
     El tiempo de horneado es de unos 10 ó 12 minutos, pero el truco para saber que está listo es esperar hasta que se dore por encima. Una vez dorado, sabremos que está listo.

     Es conveniente esperar a que el pan se temple antes de empezar a manipularlo para extraer el papel.

     Mientras tanto podemos ir preparando nuestro relleno. En mi caso se trata de una ensalada de pollo, tomate, lechuga y espárragos blancos.
     En primer lugar picaremos y lavaremos bien la lechuga, dejándola escurrir durante unos 10 minutos. Lavar bien los tomates y cortarlos en rodajas. Trocear la pechuga de pollo. Pondremos todos estos ingredientes junto con los espárragos en un bol y aliñaremos ligeramente la ensalada (digo ligeramente porque después tendremos vinagreta para añadir a la ensalada)

     Preparar la vinagreta de queso ha sido un gran descubrimiento, porque es fácil y está muy rica. Por otra parte se parece muchísimo tanto en textura como en sabor a la mayonesa y con la ventaja de que ahora que llega el calor es mucho más segura al no llevar huevo.
     Para prepararla pondremos el aceite de oliva, el vinagre y la sal en un vaso hondo y con la batidora los mezclaremos durante un minuto. Iremos añadiendo el queso cucharada a cucharada y mientras tanto seguiremos mezclando con la batidora en el fondo del vaso, sin levantar hasta que la vinagreta no adquiera una consistencia como la de la mayonesa.

Aprovechando restos de masa hice estos pequeños detalles

     Por último nos queda montar el plato y para ello la ensalada debe quedar dentro del pan. Es tan fácil como poner el pan boca abajo, es decir con su abertura inferior hacia arriba. Por la abertura iremos introduciendo la ensalada y cuando lo tengamos listo tan sólo hay que poner un plato encima y darle la vuelta de la misma forma que lo hacemos con una tortilla.

    Lo bonito de esta receta es presentarlo sin abrir y que sea el mismo comensal quien lo abra... ya veréis lo bien que lo pasais viendo su cara.

     Y si os habéis quedado con más ganas de ver otras versiones del pan kínder y para que no os perdáis las propuestas de las otras cuatro desafiadoras os recomiendo que paseis por el blog de Desafío de en la cocina.

     El Desafío cierra por vacaciones, pero volverá de nuevo el 20 de septiembre con una receta salada de la mano de Carolina del blog Tomillo, laurel y otras cosas de comer