Pollo al vino #cocinadecine

Con la nueva iniciativa de La Cocina Typical Spanish hemos querido que os enamorárais, y no sólo a través de la cocina, también a través del cine.

¿Quién no tiene una película de amor entre sus favoritas? ¡Todos! Y, de ser así, es más que probable que en vuestra peli aparezca comida en alguna escena: un desayuno romántico, una cena que el protagonista le prepara a su amada, los dos protagonistas cocinando juntos, la tarta de una boda,... Quizás la comida fuese un detalle en el que hasta ahora no nos habíamos fijado, pero es algo  que no suele fallar en toda película romanticona que se precie.

Y, en eso hemos querido hacer hincapié en esta ocasión, en una #cocinadecine.

El recopilatorio #cocinadecine viene cargado de sugerencias gastronómicas y cinematográficas que, yo de vosotros, no me perdería.

La película que yo he elegido no es de esas míticas que se nos vienen a la cabeza así de repente. "Tenías que ser tú" es una comedia romántica, ligerita, en la que la protagonista decide pedir matrimonio a su novio un 29 de febrero ya que, según una tradición irlandesa, quien pide matrimonio ese día no puede ser rechazado. Ella emprende el viaje para reunirse con su novio y, en el camino, conoce a un mesonero irlandés que es el que prepara la receta de pollo al vino que os dejo a continuación.

De la peli no os voy a contar mucho más, prefiero que la veáis.

Teniendo en cuenta que la película transcurre en Irlanda, he buscado recetas de pollo al vino típicas de allí pero no he encontrado ninguna que se le parezca a lo que ellos preparan. Lo más parecido es la típica receta francesa de pollo al vino (coq au vin) que sí lleva entre sus ingredientes el vino (como su propio nombre indica) y zanahorias (la chica, corta zanahorias en una escena de la película).También aparece picando col y, aunque este ingrediente no forma parte de la receta francesa, yo sí se lo he añadido, además de cebolla y champiñones.

¡Color y sabor asegurados! Con esta receta, voy a enamorar más a menudo, ¡pienso repetirla!.

(Para  4 personas)

- 4 contramuslos de pollo (la receta típica se prepara con pollo de corral) Podéis cocinar otras partes del pollo: muslitos de pollo, pechugas de pollo o un pollo troceado.

- 3 zanahorias

- 1 cebolla

- 1/4 de col

- 150 gr. de champiñones

- 600 ml. de vino tinto (yo utilicé Rioja)

- 200 ml. de agua

- Aceite de oliva virgen extra

- Pimienta negra molida

- Sal

En primer lugar, salpimentaremos el pollo. Después, lo pasaremos a una cacerola, con una buena base de aceite de oliva, donde lo doraremos por todos lados. Una vez  que el pollo esté sellado por todas partes, lo apartaremos en un plato.

Picaremos la cebolla y la pondremos en la cacerola con el aceite donde hemos cocinado el pollo, a fuego bajo.

Mientras tanto, pelamos y cortamos las zanahorias en rodajas finas. Picaremos la col en juliana, previamente lavada, y laminaremos los champiñones, que también habremos limpiado previamente.

Todo esto lo añadiremos a la cacerola donde tenemos la cebolla y lo rehogaremos entre 5 y 10 minutos.

Justo cuando la verdura empiece a estar tierna, añadiremos el vino y dejaremos que hierva durante 5 minutos para que se vaya el alcohol. Después, añadiremos el agua, lo removemos para mezclar los líquidos y pondremos los contramuslos de pollo junto al resto de ingredientes.

A partir de éste momento hay que dejar cocinar el pollo, como mínimo, 25 minutos.

Si pasado ese tiempo veis que el pollo está listo pero que queréis reducir un poco más la salsa, apartaremos el pollo y dejaremos que la salsa siga cocinándose.

Al final, sólo necesitaréis dar un golpe de calor al pollo junto a la salsa. Y, listo para servir.

¡No me digáis que no es precioso el tono morado que cogen el pollo y la salsa!

¿Queréis cocinar el pollo de otra forma?

Podéis hacerlo con almendras, al estilo chino. Un guiso donde el pollo aparece acompañado también de verduritas, con almendras y marinado en salsa de soja.

Otra forma curiosa de prepararlo es pollo al curry, donde el pollo va cocinado en nata, con verduras y con sugerentes especias, entre las que destaca el curry o el jengibre.