Naranjas de gelatina

     La receta de hoy es una propuesta bien sencilla, ligerita y muy resultona para culminar cualquier comida o cena y que por ser muy vistosa puede servir para celebraciones como la que está al caer de San Valentín.

     Se trata de una naranjas de gelatina (sí, ya lo sé... últimamente me ha dado por la gelatina!!) preparadas a partir del propio zumo de la naranja y que constituyen un postre muy digestivo y para nada pesado.

 (para cuatro personas)

- 4 naranjas, (aconsejable que sean para hacer zumo)
- 6 hojas de gelatina (dependiendo de cada marca, habrá que ver las instrucciones al dorso)
- 100 gr. de azúcar (podéis sustituir por edulcorante)

Opcional: Nata montada (en mi caso, Central lechera Asturiana) y fideos de  colores (puede servir cualquier otro topping)

     En primer lugar, cortaremos las naranjas por la mitad y exprimiremos su zumo con cuidado de no estropear y sin que se rompan las cáscaras de naranja.

     Limpiaremos bien por dentro las cáscaras de naranja, retirando los restos de pulpa que no se han eliminado al exprimir.

    Reservaremos las cáscaras.
   
    Pondremos las hojas de gelatina en agua fría para que vayan ablandando.
   
    Por otro lado, mediremos la cantidad de zumo que tenemos y añadiremos agua hasta conseguir 500 ml (medio litro) de líquido entre zumo y el agua.

    Pondremos a hervir esta mezcla de zumo y agua. Añadiremos el azúcar. Removemos para que se disuelva y en cuanto empiece a hervir retiramos del fuego.
    Escurrimos el agua de las hojas de gelatina (ya ablandadas) y las añadimos al zumo, removiendo para que la gelatina se disuelva completamente.
    Una vez hecho esto, iremos rellenando las cáscaras con el zumo de naranja.

    Introducimos en la nevera durante unas 12 horas.
   
    ¡¡Y ya están listas!!

    Como sugerencia de presentación, podéis poner nata montada por encima y fideos de colores (como en mi caso) o podéis cubrir la parte superior con chocolate fondant.

Espero que os guste.