Croquetas de bacalao y mejillones

     Hoy os voy a enseñar una receta de croquetas caseritas muy buenas. Para ello vamos a utilizar bacalao y mejillones

Ingredientes:

- 240 gr. de bacalao desalado

- 150 gr. de mejillones sin concha (yo los uso congelados)

- 150 gr. de harina

- 1 cebolla

- 750 ml de leche entera

- aceite de oliva

- sal

     El primer paso será trocear la cebolla y freirla.



Trocearemos el bacalao en trozos pequeños y los añadiremos a la sartén junto con los mejillones. También añadiremos un poco de sal.

     Lo dejaremos que se vaya rehogando bien, hasta que todos los ingredientes estén hechos. Después los pasaremos por la picadora.

Ya picados los ingredientes, los dejaremos un momento aparte porque vamos a ponernos con la bechamel.

En una sartén con un poco de aceite caliente pondremos la harina y dejaremos que se tueste sin que se queme, para ello la vamos a remover durante un minuto u dos.

Y seguidamente vamos a ir añadiendo la leche pero poco a poco. Según vayamos viendo que la harina necesita más leche le iremos poniendo más. Y no dejeis de removerlo, intentando que no os salgan grumos.

Si los mejillones que habeis comprado son sin cocer, podeis añadir también un poco del agua resultante de cocer porque le aportará más sabor.

Cuando la bechamel haya conseguido la consistencia adecuada y empiece a hacer "plof plof" (es decir, cuando esté hirviendo) estará lista.

En ese momento le vamos a añadir a la bechamel los mejillones y el bacalao, y lo mezclaremos todo bien.

Pondremos la masa en una fuente o bandeja que no tenga mucho fondo. A ser posible tendrá que ser plana, y dejaremos que se enfríe.

     Cuando pierdan temperatura, tapais la masa con papel film y a la nevera durante un par de horas. Podeis dejarlas más tiempo ahí si no las vais hacer inmediatamente.

     Para hacer rebozar las croquetas vamos a necesitar huevo y pan rallado. Primero cogeremos un poco de masa con una cuchara y nos ayudaremos con otra cuchara para dar la forma característica que tienen las croquetas.
     Después las pasaremos por huevo...

     ... después por pan rallado...

Aquí las teneis todas rebozadas, que van a ir directamente a la sartén. Las del taper pequeño son para un "seguidor" que ya sabe quien es y al que no le gusta mucho la coliflor (jejejeje)

     Cuando estén doraditas las sacaremos y pondremos a escurrir para quitarles el aceite sobrante.
¡¡Y aquí las tenemos!!

     ¡¡Espero que os gusten!!