Postre de queso y melocotón

     Este postrecito que os enseño hoy es un poco invención mía, vamos que lo fuí haciendo sobre la marcha y estoy muy contenta con el resultado. He conseguido un postre muy rico y dulce que a la vez nos ayuda a cuidar nuestra línea porque tienen muy pocas calorías y apenas tiene grasas.

     Los ingredientes que vais a necesitar para su preparación son:

- 1/2 litro de leche desnatada
- 8 quesitos light
- 80 gr. de azúcar (si usais edulcorante, le restareis calorías... lástima que no lo tuviese en casa en ese momento)
- 1 sobre de gelatina de melocotón (el sobre que utilicé tenía 92 gr. de gelatina. Comprobad la cantidad de vuestro sobre, porque las cantidades son distintas en cada marca)
Opcional:
- Melocotón en almibar. (para decorar, o para incorporarlos en trocitos dentro del pastel) Yo no he utilizado melocotón en almíbar porque tengo alergia al melocotón y no puedo tomarlo; de hecho, he utilizado la gelatina de melocotón porque sólo tiene sabor a melocotón pero no contiene nada de esta fruta.
- Canela en polvo para decorar (muy recomendable, pero sólo si os gusta)

     ¡¡Pues empezamos!!

     Lo que vamos a hacer en primer lugar será poner en un bol los quesitos, el azúcar o edulcorante y la leche. Con la ayuda de una batidora lo vamos a batir todo.

     Por otro lado, prepararemos la gelatina. Tal y como indica en el envase, pondremos 400 ml de agua a hervir y en 100 ml de agua diluiremos la gelatina. Cuando el agua empiece a hervir le añadiremos la gelatina diluida y dejaremo que de nuevo empiece a hervir, eso sí, sin dejar de remover. Cuando empiece a hervir, lo retiramos. Vamos a dejar que pierda un poco de temperatura y lo mezclaremos con los ingredientes que batimos anteriormente (los quesitos, el azúcar y la leche). Aquí es donde podeis ponerle trocitos de melocotón en almíbar.

     Una vez mezclados todos los ingredientes, lo vamos a ir vertiendo en el recipiente o recipientes que tengamos pensado servirlo.
     En esta ocasión yo he pensado en unas copas para servirlo de forma individual. También he puesto parte en una flanera.

     Una vez lo tenemos en los recipientes, vamos a esperar a que pierda un poco de temperatura. Seguro que os habreis dado cuenta que en la parte superior aparece una especie de "espuma" (resultado del haber mezclado los ingredientes con la batidora, a gran velocidad). Para quitarla, es mejor esperar cinco minutos y retirarla con el dorso de una cuchara. Ya vereis que bien se retira y el aspecto final será mejor.

     Lo vamos a meter en la nevera, cuanto más tiempo mejor. En unas cinco horas el postre estará cuajado pero si esperais un poco más mucho mejor. Yo suelo hacerlo por la tarde-noche cuando tengo pensado consumirlo al día siguiente.

     Transcurrido el tiempo necesario... lo sacaremos de la nevera y lo podemos decorar de la forma que más nos guste.
     En la versión más dulce, he espolvoreado con canela, he puesto unas guindas y he vertido por encima un almíbar.

     En la versión más light, he espolvoreado con canela y he añadido un par de arándanos (ya os conté que los venden deshidratados en algunos supermercados)

  
     ¡¡Una ventaja que se me olvidaba!!  ¡¡Tardareis en prepararlo 10 minutos y el resto lo hace la nevera!!
     Como siempre espero que os queden ganas de probarlo....
     Saluditossssss